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Necesito un cambio en mi vida

Lectura de 9 mins

¿Quién alguna vez ha dicho: “Necesito un cambio en mi vida”?

La realidad es que todos los días estamos siendo transformados, la pregunta es: "¿En qué nos estamos transformando?".

En este post te comparto "cómo podemos ser transformados diariamente para ser más semejantes a Jesús".

Puedes escuchar el mensaje completo en el siguiente video o leer el resumen:

¿Quién alguna vez ha dicho: “Necesito un cambio en mi vida”?

Por mucho tiempo yo creía, y tal vez enseñé mal, que el hombre no podía cambiar a menos que Dios lo cambiara.

Pero me he dado cuenta que en realidad esto es un error… Si bien hay cosas profundas que solo Dios puede cambiar, la realidad es que todos los días estamos cambiando.

Yo miro 5 años atrás y soy muy diferente en todo sentido: físico, psicológico, emocional, etc.

Reflexiona por un momento cómo eras unos años atrás.

¿Qué cosas han cambiado en tu vida? ¿Qué cosas que creías de cierta manera ahora piensas diferentes? ¿Qué cosas que te afectaban emocionalmente ya no lo hacen?

La realidad es que Dios nos diseñó para cambiar.

Todos los días estamos siendo transformados hacia algo… Pero la voluntad de Dios es que seamos transformados cada vez más parecidos a Jesús.

Esto es justo lo que dice el apóstol Pablo en Romanos 8:

📖 28 Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos. 29 Pues Dios conoció a los suyos de antemano y los eligió para que llegaran a ser como su Hijo, a fin de que su Hijo fuera el hijo mayor entre muchos hermanos.

Romanos 8:28-29 NTV

Este pasaje se suele malinterpretar al dejarlo solo en que Dios hace que todas las cosas actúen para nuestro bien. Pues normalmente no decimos qué es ese bien y nuestra mente rápidamente suele interpretar “bien” como “comodidad”.

Pero si leemos el siguiente versículo nos damos cuenta que lo que Dios llama bien es llegar a ser como Su hijo.

Eso significa que Dios usa todas las experiencias de nuestra vida con el propósito de hacernos cada vez más parecidos a Jesús.

A ese proceso es lo que en términos bíblicos llamamos “santificación”.

Y me encanta porque, muchas veces la santidad se llegaba a ver como una imposición, un deber o una carga. Pero el Señor nos muestra que la santidad es un regalo.

Si necesitas un cambio en tu vida, el Señor te lo quiere dar.

Él quiere transformarte a la mejor versión que puedes llegar a ser, esto es, ser semejante a Jesús.

Definiendo santificación

📖 39 Luego Jesús les dio la siguiente ilustración: «¿Puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en una zanja? 40 Los alumnos [discípulos] no son superiores a su maestro, pero el alumno que complete su entrenamiento se volverá como su maestro. Lucas 6:39-40 NTV

La santificación es el proceso a través del cual el Espíritu Santo nos va perfeccionando a partir del nuevo nacimiento para ser más como Jesús.

Es el fruto del discipulado. Ser discípulo de Jesús significa ser formado para ser semejante a nuestro maestro, Cristo.

La santificación no es solo un cambio externo aparente, sino es una transformación radical de nuestro interior (mente, emociones y voluntad) que termina manifestándose externamente.

La santificación es tanto estática (un estado) como dinámica y progresiva (un proceso).

¿Cómo somos transformados?

Siempre estamos siendo transformados

Todos nosotros todos los días estamos siendo discipulados por algo. Por tanto, todos los días estamos siendo transformados a la imagen de algo.

La pregunta es: ¿quién nos está formando? ¿a qué imagen estamos siendo transformados?

Medios a través de los que somos transformados

1. Las experiencias que vivimos

A través del tiempo, las experiencias que vivimos, buenas o malas, nos van formando.

Toda esta transformación sucede aún si no somos intencionales. Con el simple de hecho de salir y hacer tu día, estás siendo formado y por tanto transformado.

Ejemplos:

  • Negativos:
    • Una persona que pasa por un evento traumático se puede volver temerosa.
    • Una persona que pasa por una mala relación se puede volver desconfiada.
  • Positivos:
    • Hay personas que después de tener un hijo se vuelven más maduras o responsables.

2. Las narrativas que creemos

Todos tenemos narrativas que hemos creído a lo largo de nuestra vida, las cuales hemos adoptado de nuestra familia, entorno, el lugar donde estudiamos, etc.

Las historias o narrativas que creemos determinan la forma en la que vivimos.

Ejemplo: Nuestra visión de la sexualidad. Si yo creo que Dios no está involucrado en la creación, sino que el hombre es un accidente cósmico y no somos más que animales inteligentes. Por tanto, el matrimonio es simplemente una construcción social y el sexo un intercambio biológico. Si esa es la historia que creo, claramente tendrá un efecto en cómo expresaré mi sexualidad.

3. Los hábitos que adoptamos

Mucho se ha escrito últimamente acerca del poder de los hábitos.

Somos el resultado de nuestros hábitos regulares. Nos convertimos en aquello que hacemos regularmente.

Las cosas que hacemos regularmente nos transforman.

Los hábitos tienen el poder de cambiar nuestros deseos y pasiones, lo que la Biblia llama nuestro corazón.

Ejemplo: Los gustos adquiridos de alimentos.

4. El entorno en el que nos desarrollamos

La propia ciudad donde crecemos nos está formando constantemente.

Ejemplo:

  • La forma en que conducen las personas de la ciudad. Poco a poco nos vamos volviendo semejantes.
  • El ambiente laboral en una empresa. Positivo o negativo, vamos adoptando comportamientos de ese ambiente.

5. Nuestras relaciones

Las personas con las que nos relacionamos constantemente nos forman.

Ejemplo: Nos vestimos o adquirimos gustos similares a aquellos con los que nos rodeamos.

¿Cómo somos transformados a la imagen de Cristo?

Mitos sobre la santificación

Mito #1 - Solo necesitas saber más de la Biblia

Muchas veces creemos que lo único que necesitamos para ser santificados es saber más dela Biblia. Eso es un error.

Pero la realidad es que saber algo no es sinónimo de poder hacerlo ni de desear hacerlo.

No podemos ser transformados a la imagen de Cristo solo por aumentar nuestro conocimiento.

La transferencia de información no produce transformación.

Mito #2 - No necesitas hacer nada, todo lo hace Dios

Sin Dios no podemos pero sin nosotros Dios no lo hará.

Esto proviene de un error de creer que gracia significa no esforzarse. La gracia nos permite acceder a lo que no merecemos pero no implica que deje de existir un llamado al esfuerzo y la entrega por parte de nosotros.

¿Cómo ser transformados a la Imagen de Cristo?

💡 Siempre estamos siendo transformados por eso debemos ser intencionales en que nuestra transformación sea a la imagen de Jesús.

Para ello debemos encontrar aquella actividad espiritual que alinee los mecanismos de transformación hacia Cristo.

1. Experiencias → Consuelo de Dios

📖 4 Él nos consuela en todas nuestras dificultades para que nosotros podamos consolar a otros. Cuando otros pasen por dificultades, podremos ofrecerles el mismo consuelo que Dios nos ha dado a nosotros. 5 Pues, cuanto más sufrimos por Cristo, tanto más Dios nos colmará de su consuelo por medio de Cristo.

2 Corintios 1:4-5 NTV

Cuando pasamos por experiencias duras o traumáticas, si éstas no son procesadas correctamente, traen un cambio negativo a nosotros.

La psicología busca muchas veces ayudar a las personas a superar estas experiencias y canalizarlas hacia algo positivo.

Pero que mejor cuando esas experiencias pueden ser llevadas delante de Dios para recibir Su consuelo. Para recibir libertad en lo más profundo de nuestra alma.

Jesús mismo tuvo que pasar por sufrimiento, pero el Señor usó todo ese dolor para el bien de muchos.

Dios no provoca el sufrimiento o el dolor, pero cuando lo llevas delante de Él, es experto en usarlo para convertirte en alguien mejor.

📖 28 Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos. 29 Pues Dios conoció a los suyos de antemano y los eligió para que llegaran a ser como su Hijo, a fin de que su Hijo fuera el hijo mayor entre muchos hermanos.

Romanos 8:28-29 NTV

2. Narrativas → Enseñanza bíblica

La enseñanza bíblica alinea las narrativas que creemos con los pensamientos de Dios.

Crea en nosotros las narrativas verdaderas.

📖 2 No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de pensar. Entonces aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes, la cual es buena, agradable y perfecta. Romanos 12:2 NTV

Formas en las que recibimos enseñanza bíblica:

  • Predicación en reunión de la iglesia
  • Estudiar la Biblia
  • Leer libros sobre Jesús
  • Tomar cursos de formación bíblica y ministerial

📖 Hazlos santos con tu verdad; enséñales tu palabra, la cual es verdad. Juan 17:17 NTV

3. Hábitos → Disciplinas espirituales

En el sermón del monte, Jesús comienza y termina Su enseñanza hablando acerca de la importancia de practicar sus enseñanzas.

Es entrenarnos en el estilo de vida de Jesús.

No se trata de intentar fuertemente sino de practicar constantemente.

La práctica constante del estilo de vida de Jesús nos lleva progresivamente a ser más cómo Él y apreciar lo que Él ama.

Las disciplinas espirituales reorientan nuestras prioridades, deseos y afectos.

4. Entorno → El Espíritu Santo

El Espíritu Santo debe ser nuestro entorno constante más que nuestra ciudad.

Necesitamos pasar tiempo en la Presencia de Dios y ser conscientes de que Él está con nosotros y nosotros en Él.

📖 18 Así que, todos nosotros, a quienes nos ha sido quitado el velo, podemos ver y reflejar la gloria del Señor. El Señor, quien es el Espíritu, nos hace más y más parecidos a él a medida que somos transformados a su gloriosa imagen.

2 Corintios 3:18 NTV

5. Relaciones → Comunidad

Naturalmente nuestra relaciones las seleccionamos pro preferencia. Nuestra comunidad cristiana no la elegimos normalmente.

No podemos seguir a Jesús solos.

La transformación sucede en comunidad por dos cosas:

  • Nos expone. Muestra todas nuestras imperfecciones que no son visibles cuando estamos solos. Es en el contacto persona a persona que se muestra lo que realmente somos.
  • Nos anima. Una comunidad sana nos recuerda constantemente el amor de Dios y nos anima a caminar de acuerdo a Jesús.

📖 El hierro se afila con el hierro, y el hombre en el trato con el hombre. Proverbios 27:17 NVI

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